Quinto Bat
Por Edgar Pérez H.
Del año 2000 a la fecha, en la más reciente etapa de los Pericos de Puebla, han sido varios los peloteros dominicanos que, han brillado con el equipo, a propósito de la llegada de los lanzadores Edgar Santana, Antonio Santos y Cristopher Molina, además del receptor Raudy Read, vale la pena hacer un recuento de los peloteros de esta nacionalidad. Curiosamente, en las etapas anteriores de las novenas poblanas, fueron contados los jugadores de nacionalidad dominicana que llegaron a destacar en Puebla, si acaso, podemos mencionar a Luis Lora, pelotero que fue campeón con los Ángeles de Puebla de 1979, o a Bernie Tatis que tuvo una destacada participación con Pericos en 1993. Por lo general en los ciclos anteriores han predominado los jugadores venezolanos, cubanos y puertorriqueños.
Quien vino a marcar el camino de los peloteros dominicanos en esta última etapa y, además primer ídolo de la afición poblana en el regreso de la franquicia, fue Lorenzo De la Cruz, pelotero de gran corpulencia que, en el año 2000 pegó 29 cuadrangulares y se acreditó el guante de oro en el jardín derecho. Lorenzo tuvo una segunda campaña con los emplumados en el 2001, pero no logró rendir lo mismo que, en su primer año, pero a pesar de ello continuó siendo referente de la ofensiva de los Pericos.
Otros que marcaron huella en el equipo fueron Willis Otáñez y Sandy Madera, ambos fueron nombrados “Jugadores Más Valiosos” de la LMB en las campañas del 2010 y 2014 respectivamente. Otáñez jugó par de temporadas (2009-2010) sus grandes actuaciones y su carisma hizo que fácilmente se ganará el corazón de los poblanos. Ganó el Derby de jonrones de la temporada 2009 y jugó par de postemporadas, llegando a la Serie Final en el 2010. En total pegó 31 jonrones con 167 remolques y un total de 262 imparables. En lo que respecta a Madera, jugó tres temporadas con los verdes, además de su nombramiento de JMV, también fue Champion Bat, al igual que Otáñez, al batear para .403 en el 2014. En el lapso que jugó para Pericos pegó 421 hits con 55 bambinazos. También jugó una Serie del Rey, e hizo historia con el equipo al pegar tres jonrones en el segundo juego de aquella Serie ante los Diablos, y claro, actualmente quien da la cara, en el bateo, por Republica Dominicana es Cristhian Adames, pelotero que, en un corto plazo se coronó con los emplumados y se convirtió en el primer pelotero del Club en lograr el ciclo.
En lo que se refiere a lanzadores, actualmente está marcando época con la novena emplumada Gabriel Ynoa, en par de años ha mostrado su calidad y fue uno de los principales artífices en campeonato del 2023, pero antes de él, vale la pena recordar a Lorenzo Barceló, en tres años abrió 58 juegos con foja de 27-17. Jugó la Serie Final del 2010, pero se lesionó en el segundo juego ante Saraperos y no pudo recuperarse, situación que Saltillo capitalizó para llevarse el campeonato.
Son muchos los peloteros que tenemos que enunciar, como Willy Taveras, outfilder que fue campeón con Pericos en 2016, además de que implantó un récord de LMB, con más turnos al bat, pegando de hit consecutivamente; Manny Martínez tuvo años explosivos con los emplumados, pegó 37 jonrones entre el 2005 y 2006, con 266 hits; Mendy López solo jugó un año con Pericos, pero en el 2011 disparó 31 jonrones con 106 producciones y también ganó el Derby de Cuadrangulares de aquella campaña; Ángel Berroa tuvo un gran 2014 con los verdes, llegó en sustitución de José Castillo y cumplió espectacularmente con 23 jonrones y 98 carreras impulsadas, bateó para .334; varios cerradores también tuvieron papeles cumplidores como Manny Aybar en el 2005, Francisco Cruceta en el 2015 y Jailen Peguero en el 2013; hablando de lanzadores vale la pena recordar también a José Alfredo Valdez que fue el caballo de batalla del 2021 o a José Mercedes con los Pericos del 2007. Han sido muchos peloteros de nacionalidad dominicana que han vestido el plumaje, que falta enunciar a muchos otros que, no lograron tener mucha trascendencia, aunque claro, no podemos omitir el nombre de Miguel Tejada, pero de él, platicaremos en otra columna.
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